Ternera asada con patatitas en cazuela

Exs

Esta es una receta infalible en mi casa, le gusta prácticamente a todo el mundo y es sinónimo de éxito,  sin liarse mucho. Es además una receta  entrañable para mi, ya que era una de las especialidades de mi madre y fue  ella la que me enseñó a cocinarla, por ello le tengo un cariño especial. 

Ingredientes:
1 k. de carne para asar
100 ml. de vino blanco
50 ml. de aceite de oliva virgen
4 o 5 chalotas
Vinagre de Jerez
Ajo y perejil
Sal y pimienta
500 g. de patatitas
Agua
Elaboración:

Unas horas antes, bridamos  la carne y la adobamos  con ajo, perejil, una pizca de sal, pimienta al gusto, un chorrito de  vinagre de jerez y un poquito de aceite , majados en el mortero.

Ponemos una cazuela de fondo grueso o de barro al fuego con el aceite y dejamos que  se caliente bien, mientras tanto escurrimos bien la carne y reservamos el adobo.

Doramos la carne, cuando esté dorada  por todos lados añadimos el adobo reservado, las cebollitas y el vino blanco, impregnamos bien la carne, bajamos el fuego, tapamos la cazuela y dejamos hacer unos 10 minutos, damos la vuelta y dejamos otros 10.

Entre tanto preparamos las patatitas y las escurrimos bien. 

Transcurridos los 20 minutos, añadimos las patatas, le ponemos sal, subimos el fuego ligeramente, removemos para que se vayan dorando 8, 10 minutos.  Tapamos la cacerola y dejamos hacer a fuego muy bajo. El asado requiere constante vigilancia, para volver la carne, remover las patatas y sobre todo que no se quede seco, si esto ocurriera añadiremos una  copita  de agua  las veces que sea necesario.

Las patatitas tardan en hacerse unos 30 minutos y la carne, depende del gusto de cada uno, a mi me gusta en su punto sin sangre pero jugosa por lo que la dejo unos 40 minutos. Un buen truco, es pinchar y si no sale sangre está lista y en este caso la retiramos la tapamos con un papel de aluminio, siempre con la cara brillante en contacto con el alimento, sobre este colocamos un paño de cocina y la dejamos reposar un buen rato 15-20 minutos. 

En esta receta suele sobrar salsa, que se puede utilizar en otras preparaciones, para ello la pongo en las cubiteras para el  hielo y la congelo, luego las coloco en una bolsa de congelar debidamente etiquetada. Un par de cubitos aportan muchísimo sabor a un arroz, a la salsa para pastas, alguna salsa para acompañar, etc, etc.